Desde 2002 comenzamos a presentarnos a algún que otro concurso de fotografía y con un poquito de conocimiento y otro poquito de suerte ambos conseguimos algunos premios que hicieron que amigos y conocidos nos empezaran a animar para que nos dedicáramos profesionalmente a la fotografía. Así, dándole muchas vueltas a esas palabras fue como en 2012 surgió Luzgrafía. Como proyecto y germen de todo lo que ha venido después.
Cursos ya específicos de fotografía de bodas, de iluminación, de edición, de buscar el momento, de saber contar una historia con imágenes… de parte de varios fotógrafos reconocidos a nivel nacional e internacional… muchas horas y dinero invertido para llegar a ser una de las profesiones más bonitas del mundo, FOTÓGRAFOS DE BODA.
Esto nos ha permitido conocer a personas maravillosas y compartir con ellas multitud de historias, momentos, anécdotas divertidas… en definitiva recuerdos.
Ya que nos conoces desde nuestros orígenes, queremos también mostrarnos desde lo más personal.
Nos encanta disfrutar del campo: los almendros en flor, los campos de amapolas, los dorados trigales, un arroyo corriendo…
Relajarnos mirando una bonita puesta de sol o un cielo azul lleno de nubes blancas de algodón… sentir la libertad de vivir sin horarios ni restricciones mientras una suave brisa nos refresca la cara.
Aguardar con ilusión a que una estrella fugaz aparezca y pedirle un deseo en esas, ya tradicionales, noches de agosto en familia.
Un día en familia, una tarde noche con amigos.
Ver llover, el olor a tierra mojada…
Dormir, practicar yoga…
Tocar la guitarra o el piano…
El colorido de la primavera, el tono dorado del otoño, las pelis y mantas en invierno o un simple helado en verano en la mejor de las compañías.